Cuando se habla de deudas y de los procesos judiciales que muchas veces acompañan a esta situación, aparece una figura que para muchos resulta desconocida, pero que cumple un rol esencial en la justicia chilena. Se trata del receptor judicial.
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¿Qué es y qué hace un receptor judicial?
Este profesional es un auxiliar de la administración de justicia y un ministro de fe pública. Su presencia garantiza que lo que dictan los tribunales se cumpla de manera correcta.
Actúan de manera transparente y con apego a la ley.
El receptor judicial es quien se encarga de notificar a las personas sobre las resoluciones emitidas por un tribunal.Cuando existe una demanda, una citación o una sentencia, este funcionario es el que lleva la comunicación de manera formal. Esto asegura que la persona deudora esté enterada de cada paso de su caso y pueda ejercer sus derechos. Sin esta notificación válida, el proceso simplemente no avanza, lo que muestra la importancia de su trabajo en las causas de deudas.
Además de notificar, los receptores judiciales cumplen otra función decisiva. Ejecutan embargos y participan en remates de bienes.
Cuando un tribunal ordena la incautación de muebles, inmuebles u otros bienes para garantizar el pago de una deuda, es el receptor quien materializa esa orden. Lo hace siguiendo un procedimiento reglado, cuidando la transparencia y evitando abusos.
Su labor toca directamente la vida de quienes enfrentan dificultades económicas.
Puede significar la pérdida de bienes para cubrir compromisos impagos.
Su papel no termina ahí
También son responsables de la custodia de bienes y documentos, lo que implica resguardar lo embargado y dar cuenta fiel de cada diligencia. Por eso, aunque pase desapercibido, el receptor judicial es fundamental para que los procesos de cobranza judicial sean efectivos, legales y transparentes.
Nuestro equipo de especialistas puede ayudarte a revisar tu caso y encontrar la mejor estrategia para que recuperes tu tranquilidad.